Las Cuevas de Hércules, antiguas cisternas romanas, iglesia medieval y sus leyendas mágicas
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En las Cuevas de Hércules se pueden ver dos espacios diferenciados, correspondientes a épocas muy diferentes. Por un lado, unos espacios subterráneos abovedados, que fueron unas antiguas cisternas de época romana. Y, por otro lado, los restos de un templo visigodo, una mezquita, y la iglesia románica de San Ginés, del s. XII, que se sucedieron en el tiempo sobre dichas cisternas romanas.
¿Por qué se llaman Cuevas de Hércules?
Según la tradición legendaria de Toledo, se dice que estas cuevas fueron parte del Palacio de Hércules, o lugar donde el rey Rodrigo abrió un cofre prohibido, para descubrir la profecía que auguraba el final del reino visigodo a manos del Islam.
¿Qué cuenta la leyenda sobre las Cuevas de Hércules?
Las Cuevas de Hércules han dado lugar a múltiples leyendas, ya recogidas en textos medievales sobre la ciudad de Toledo.
Según la leyenda, el semidios Hércules, habría construido sobre estas oquedades naturales sus palacios, donde enseñaba las artes mágicas a sus discípulos. En su interior ocultó las desgracias que amenazaban a España.
Puso un candado en la puerta y ordenó, que cada nuevo rey visigodo añadiera uno más, ya que las amenazas se cumplirían el día en que uno de ellos fuera curioso y entrara.
Según la leyenda, Don Rodrigo, el último rey visigodo, fue el rey que violó el recinto protegido y abrió el cofre prohibido, pensando que podría ocultar realmente un gran tesoro. En el cobre encontró un pergamino con la profecía que auguraba el final del reino visigodo, a manos del islam.
Según la leyenda, del palacio sólo queda la actual cueva que ocultaría maravillosos tesoros, entre ellos la famosa Mesa de Salomón.
¿Qué se sabe sobre la antigua cisterna romana?
Hoy podemos ver allí la cisterna romana de la segunda mitad del siglo I d.C., y conocer la interesante técnica de ingeniería con que fue construida.
Se cree que esta cisterna estuvo en uso relativamente poco tiempo, al ser sustituida por otras mayores, integradas en la nueva red hidráulica de la antigua ciudad romana.
¿Qué se construyó sobre las cisternas romanas?
Posteriormente, ya en época visigoda, se construyó sobre las cuevas un templo cristiano. Tras la entrada de los árabes en la ciudad se sustituyó por una mezquita.
Más tarde, probablemente en el siglo XII, se transformó en la iglesia románica de San Ginés hasta 1841, cuando por abandono acabó siendo demolida.
¿Qué podré ver en la visita a las Cuevas de Hércules?
En la visita podremos ver los restos de las diferentes construcciones que han ido sucediéndose a lo largo del tiempo.
Dispone de planta baja, primera y segunda planta, así como de una planta sótano donde se sitúan los restos del depósito de agua romano.
Las plantas primera y segunda se abren sobre la planta baja, permitiendo contemplar los diferentes restos arqueológicos y arquitectónicos del conjunto: la antigua iglesia, la mezquita y la posterior iglesia de San Gines.
Están abiertas al público gratuitamente de martes a sábado.